Imagen: Estructura cristalina de la unión
de un fármaco anti-inflamatorio no esteroide [AINES] con la β-subunidad de la Polimerasa III
de la Escherichia coli. Crédito: Aaron Oakley, UOW
Fármacos
Anti-inflamatorios no esteroides (AINES) parecieran tener efectos antibióticos, es la conclusión que
han llegado, después de estudiar la lucha contra la resistencia de múltiples fármacos,
Aaron Oakley de la
Universidad de Wollngong y sus colegas. Ellos examinaron los fármacos convencionales
que ayudan contra el dolor, la fiebre y la inflamación; por cuanto se
sospechaba que los fármacos antiinflamatorios (no esteroides) conocidos, también
podrían matar las bacterias.
El
término antiinflamatorio se aplica al medicamento o procedimiento
médico usado para
prevenir o disminuir la inflamación de los tejidos. Por su mecanismo de acción se pueden agrupar en inhibidores no
selectivos de la ciclooxigenasa e inhibidores selectivos de la
ciclooxigenasa-2, es decir, según su acción frente a la síntesis de prostaglandinas y tromboxanos.
El AINE prototipo es el acido
acetilsalicílico, más conocido por su nombre comercial de Aspirina, que químicamente es parte de los
salicilatos y su mecanismo de acción es inhibir la actividad ciclooxigenasa de la PG sintetasa al acetilar irreversiblemente
un residuo de serina. Aparte de ser antiinflamatorio, analgésico y antipirético, tiene efectos antiagregantes plaquetarios
antitrombótico, por lo cual es utilizado en la profilaxis del infarto de miocardio.
Los investigadores descubrieron que
algunos de estos AINES son capaces de adherirse a una proteína bacteriana, que
es el instrumento que permite ayudar a replicar el ADN del patógeno y su
reparación. Específicamente se trata de la β-subunidad de la Polimerasa III
del Escherichia coli. Si el funcionamiento de esta proteína esta impedida específicamente por
los AINES, ya no es posible que las bacterias se multipliquen.
Esta proteína es considerada
evolutivamente antigua, y por lo tanto, probablemente muchas, si no todas, las
bacterias serían vulnerables a los AINES.
El descubrimiento del equipo de
investigación Australiano, podría ser utilizado para desarrollar nuevas
estrategias que permitan combatir las cepas multi resistentes de bacterias; sin
embargo, los científicos no creen que las preparaciones de los analgésicos
tradicionales se puedan utilizar para éste propósito por cuanto la acción antibacteriana
es más bien baja. Ellos prefieren proponer ocupar el mecanismo de acción de los
AINES, en el desarrollo de nuevos fármacos.
Fuente: Spektrum.de (Sophia Guttenberger-Bióloga) / Wikipedia /
[Spektrum.de
traducción libre del alemán]