Imagen: Un ciego detecta una
barra de metal gracias al bastón. Crédito: UMH
Una de las claves del
nuevo sistema es que puede ser específicamente ajustado para adaptarse a las
características físicas de cada persona (altura, anchura de hombros, etc.). La
detección de los objetos se realiza mediante un conjunto de sensores que se adaptan
a un bastón blanco tradicional y mejoran su funcionalidad.
El bastón blanco es un
instrumento que identifica a las personas con discapacidades visuales y les
permite desplazarse de forma autónoma. Esta herramienta guía los pasos de los
sujetos con problemas visuales y les facilita el rastreo y la detección de los
obstáculos que se encuentran en su camino. Sin embargo, el bastón blanco
tradicional sólo permite detectar obstáculos que se encuentran por debajo de la
cintura de sus usuarios y los deja expuestos a objetos altos o suspendidos
como, por ejemplo, ramas de árboles, extintores, retrovisores de camiones y
autobuses, etc. El nuevo bastón, que ha sido desarrollado en estrecha
colaboración con sujetos ciegos, sólo genera avisos ante obstáculos por encima
de la cintura que representen un serio peligro y que sean imposibles de
detectar mediante un bastón blanco tradicional.
Enlace al vídeo de presentación del bastón inteligente-Crédito UMH
Este bastón, que sólo pesa130 gramos ,
incluye medidas de seguridad e incorpora un microcontrolador que permite
ajustar la distancia de detección a las necesidades del usuario, en función de
sus características físicas, velocidad de movimiento y de la densidad de
ocupación de la vía, para adaptarse por ejemplo a calles o zonas con una gran
densidad de personas, interior de edificios, espacios cerrados, etc. Además,
incluye una batería recargable de alta capacidad (con autonomía para varios
días) y es totalmente compatible con todos los bastones blancos que existen en
la actualidad, lo que facilita una rápida familiarización del usuario con el
tacto del bastón y, a la vez, permite una gran flexibilidad y adaptación a cada
usuario.
Este bastón, que sólo pesa
El proyecto ha sido
financiado por la Cátedra
de Investigación en Retinosis Pigmentaria Bidons Egara de la UMH y ha contado con el
asesoramiento y ayuda de la
ONCE. La idea surgió de Antonio Alarcón, uno de los miembros
de la Cátedra
de Investigación Bidons Egara y ciego, y en su diseño y desarrollo han
colaborado los profesores Eduardo Fernández, Carlos Pérez, José María Sabater,
Nicolás García, José María Azorín, así como los ingenieros Manuel Bayonas y
Juan Ramón Rubio.
Fuente/ Compilación: Oficina de
Comunicaciones de